EL IMPACTO DEL CONSUMO DE PAPEL

La fabricación y consumo de papel y el futuro de los bosques están estrechamente unidos. Cerca del 40% de toda la madera talada para usos industriales en el mundo se destina a la producción de papel. La creciente demanda de papel en el mundo es responsable de la destrucción de ecosistemas forestales vírgenes, los denominados bosques primarios.

En muchos lugares del Planeta, los ecosistemas forestales naturales han sido y son todavía sustituidos por plantaciones de árboles de crecimiento rápido cuya gestión implica la utilización masiva de herbicidas y fertilizantes químicos tóxicos.

La industria pastero-papelera también se encuentra entre los mayores generadores de contaminantes del aire y del agua, así como de gases que causan el cambio climático. Por este motivo reciclar papel y usar papel reciclado no sólo ayuda a conservar los bosques. El reciclaje de papel supone un ahorro de un 62% de energía y del 46,7% de agua. En la fabricación de papel reciclado se evita la contaminación del agua y los residuos se reducen un 93%. El papel reciclado no evita el consumo de madera pero reduce la presión sobre los bosques primarios y la demanda de más plantaciones de eucalipto.

El papel de oficina

Las oficinas están siendo una pesadilla para los bosques, siendo el papel de oficina el uso que crece más. Desde 1980 el consumo global de papel creció un 74% pero el consumo de papel de impresión y escritura aumentó un 110%.

Hay que frenar esta escalada y optimizar el consumo de papel de oficina. Y para conseguir este objetivo es imprescindible poner bajo tela de juicio el actual uso que hacemos de fotocopiadoras e impresoras.

El papel amigo de los bosques

El consumo de papel menos perjudicial para el Medio Ambiente debe atender tanto al origen de la fibra como al proceso de fabricación y blanqueo. Como mejor opción, y para la mayoría de los usos, el papel 100% reciclado post-consumo. La eco etiqueta Ángel Azul (Der Blaue Engel) es la mejor garantía para el papel reciclado. Si hay fibra virgen, no debe proceder de la destrucción de bosques primarios y debe estar certificada según los estándares del sistema de certificación forestal del Forest Stewardship Council (FSC). Cuidado con los engaños y la falsa información. El sector papelero español y numerosos distribuidores llaman “papel ecológico” al papel de fibra virgen blanqueado con dióxido de cloro (ECF, libre de cloro elemental). Este papel blanco ECF no se puede considerar ecológico.

El sello FSC

El único sistema de certificación forestal presente en el mercado que es reconocido internacionalmente es el Consejo de Administración Forestal (FSC, Forest Stewardship Council), que puede asegurar con rigor y credibilidad que los productos forestales proceden de bosques bien gestionados y dentro de la legalidad.

Este amplio apoyo social al FSC es debido a que los productos que llevan el logo FSC cumplen los Principios y Criterios del Consejo de Administración Forestal43, que abarcan tanto aspectos medioambientales como sociales y económicos. El logo FSC sólo puede ser utilizado en productos cuya cadena de custodia ha sido auditada y supervisada.

Algunos Consejos para no derrochar papel y contaminar menos:

1. Utiliza 100% papel reciclado ( no dá ningún problema de impresión o fotocopia).
2. Ajusta las propiedades de impresión para que la impresión de documentos por defecto ocupe el menos espacio posible y consuma menos papel.
3. Ajusta el formato de página, la orientación, el tipo de papel, los márgenes, el tamaño de letra, la calidad de impresión, impresión a doble cara, etc.
4. En fotocopias, imprime por las dos caras, sólo la cantidad de copias necesarias y a ser posible a doble página.
5. Siempre que sea posible, reutiliza las hojas impresas o fotocopiadas por una sola cara.
6. Evita imprimir en color si no es absolutamente necesario.
7. Asegúrate de que el papel de tu oficina es adecuadamente reciclado.
8. Objetivo último: para cada documento la calidad de impresión necesaria y el menor consumo de papel posible.